Los animales se alimentaron en dos fases y fueron separados durante todo su engorde (34,4 kg de PV inicial hasta el sacrificio) en cinco grupos distintos según la cantidad de alpiste que incorporaban sus dietas:
-Control (76% de cebada en fase I y 82% en fase II)
-25C (sustitución del 25% de la cebada por alpiste)
-50C (sustitución del 50% de la cebada por alpiste)
-75C (sustitución del 75% de la cebada por alpiste)
-100C (sustitución del 100% de la cebada por alpiste)
La digestibilidad de la PB de las dietas fue aumentando de forma lineal con la inclusión de más alpiste.
El crecimiento de los cerdos se vio favorecido en todo el periodo experimental por la dieta 25C al compararla con la dieta control (0,95 kg/d vs 1,01 kg/d; p<0,01) sin que se apreciaran diferencias entre las demás dietas. Los demás parámetros de productividad o calidad de la carne no se vieron afectados.
La conclusión de este estudio es que el alpiste puede incorporarse a las dietas de cebo sin que se vea afectado el crecimiento de los animales ni su IC.
P.A. Thacker. Canadian Journal of Animal Science 2003 (83): 89-93